GUIA DE CUIDADOS PARA PLANTAS DE INTERIOR

Una de las mejores formas para estar conectados con la naturaleza con independencia de si vivimos en la urbe, pueblo de montaña o en primera línea de playa es incorporar a nuestro hogar una planta de interior.

En esta guía vamos a profundizar en los elementos, características y cuidados que debes tener en cuenta para que tus plantas de interior crezcan sanas y fuertes para llenar de vida cualquiera de tus estancias.

¿Qué entendemos por planta de interior?

Entendemos como planta de interior cualquier especie vegetal cultivada en lugares bajo techo, como casas u oficinas. En su gran mayoría, son variedades de climas tropicales que se aclimatan fácilmente a entornos geográficos ajenos, ya que el cultivo en interior les proporciona las condiciones adecuadas. Diferentes son las plantas de balcón o de jardín, que se ubican en interiores temporalmente pero que para subsistir requieren periodos más largos al exterior.

Beneficios que nos aportan las plantas de interior

Tener plantas en casa es beneficioso para la salud, tanto anímica como psicológicamente. Habremos oído en diferentes ocasiones que los colores nos ayudan a cambiar nuestro estado de ánimo, los colores suaves tienden a calmarnos, mientras que los más intensos, tienden a aumentar nuestra percepción de energía. En cuanto al aroma, las flores ayudan a llevarnos hacia un estado de buen humor y a relajarnos.

Además, muchas variedades ayudan a purificar el aire de nuestras casas. Como sabemos, las plantas realizan la fotosíntesis, mediante este proceso estas absorben el dióxido de carbono del ambiente y lo transforman en oxígeno, lo que complementa nuestro proceso respiratorio, ya que necesitamos el oxígeno y exhalamos el dióxido de carbono. Es así como las plantas mejoran la calidad del aire que tenemos en el interior de nuestro hogar. Como consecuencia de esto también nos ayudan a respirar mejor, pues las plantas equilibran la humedad del ambiente de nuestra casa .

Tipos de plantas de interior

Las plantas de interior suelen asociarse a las plantas de clima tropical como la Monstera, Ficus Lyrata, Anthurium; muchas de las variedades de las palmáceas como la Kentia o Areca también pueden considerarse de interior si reciben la luz adecuada aunque estén bajo techo. Por otro lado tenemos las plantas crasas y cactus y de bajos requisitos de riego como el Aloe Vera, Sansevieria o Cordyline que necesitan muy pocos cuidados y son de crecimiento más lento.

Necesidades: luz, sustrato y riego

Podemos pensar que las plantas de interior no necesitan mucha luz y, lo cierto es que son pocas las plantas que pueden sobrevivir adecuadamente sin luz, por lo general todas necesitan una cantidad de 5/6 horas de luz.

Otro punto importante es el riego. Normalmente las plantas de interior (o tropicales) necesitan poco riego. Sin embargo, si necesitan un ambiente húmedo, muchas veces para conseguir esto podemos colocar perlita o turba en la base de la maceta o rociar las hojas con agua (no confundir con el riego). Si vemos que nuestra planta de interior presenta manchas oscuras (parecido a secas) significa un exceso de riego y falta de humedad. Una vez encontramos el punto exacto que necesita nuestra planta de estos dos aspectos ya tendremos el 80% del camino ganado.

Por último, debemos tener en cuenta el sustrato. Por lo general, la mayoría de las plantas necesitan un sustrato que drene bien para que el agua se filtre adecuadamente por él y llegue a las raíces. Este punto está ligado con el anterior del riego y la humedad.

Tratamientos

El mejor tratamiento para nuestras plantas de interior es la prevención y para ello debemos realizar los riegos que demande cada planta y facilitarle sus horas de luz para que pueda realizar su proceso de fotosíntesis adecuado permitiendo un crecimiento fuerte y duradero. No hay mejor barrera contra insectos u hongos.

La enfermedad más común que aparece en las plantas de interior suelen ser los hongos (90%), suelen estar relacionadas con el exceso del agua. Las enfermedades por hongos se combaten con fungicidas.

También los insectos pueden atacar las plantas: cochinillas, pulgones, mosca blanca, trips, araño roja u orugas suelen frecuentarlas muchas veces por contagio de otras plantas del hogar y otras por exceso de humedad. Lo más importante es identificar el tipo de insecto y luego aplicar un insecticida concreto.

Fertilizantes

Los distintos abonos o fertilizantes permiten darle la fuerza que necesitan nuestras plantas en periodos determinados como principios de primavera y principios de otoño. Existen diferentes tipos de fertilizantes siendo los más recomendados los líquidos para una absorción rápida o los sólidos para una mayor duración en el tiempo.

Cuidado integral de tus plantas de interior

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